21 Nov CLAVES PARA HACER MÁS FÁCIL LA HORA DE LOS DEBERES

La hora de los deberes: la hora en que padres y niños no se entienden

Las 17h de la tarde. Salida de la escuela, explicación de cómo ha ido al día, merendar, quizás alguna actividad extraescolar y, al llegar a casa, toca la hora de los deberes.

Esta acostumbra a ser la hora en que padres y niños no se entienden. Entran en pequeñas discusiones, con pactos, a veces con gritos, a veces con largos ratos con ellos para que los hagan, y múltiples otros situaciones. Y así, para algunos padres, acaba siendo cada día más cansada la hora de los deberes.

Podríamos encontrar muchas explicaciones de por qué la hora de los deberes acaba siendo en algunas casas una hora conflictiva. Podríamos pensar que ellos están cansados de tantas horas de clase. También que nosotros estamos cansados de todo el día, y además todavía tenemos cosas a hacer en casa. Podríamos pensar que les cuesta hacer los deberes solos, o bien que son perezosos. Todo esto puede ser cierto o no. Pero centrémonos en qué es el que podemos hacer para mejorar esta situación.

Claves para hacer más fácil la hora de los deberes

Organizar el tiempo

• Un rato de recreo entre la hora de salida de la escuela y la hora de ponernos a hacer deberes es fundamental. Ya sean extraescolares, un rato en el parque o en la plaza, o bien merendar conjuntamente con ellos y crear un rato distraído y divertido, los ayudará a tener más energía a la hora de volver a empezar con sus tareas.
• Establecer rutinas de estudio es muy importante. Intentar que siempre hagan los deberes a la misma hora, al mismo lugar y sobre todo, dedicar un rato cada día.
• El fin de semana no nos tenemos que olvidar de la rutina de hacer los deberes, a pesar de que no tengamos un horario tan estricto. Esta los ayudará a saber que aquella es su hora de trabajo, y que después toca la distracción. Las rutinas    sirven porque ellos lo establecen como una cosa normal en su día a día y esto nos ayudará a evitar la típica frase de “ ya lo haré más tarde”, o acabar los deberes a última hora el domingo por la tarde.

El papel de los padres

• Ponernos con ellos los primeros minutos de estudio y ayudarlos a organizar el trabajo que tienen que hacer: establecer conjuntamente qué hará primero, que después, en que necesitará vuestra ayuda y que puede hacer solo.
• Ayudarlos a ser autónomos. A veces hay padres que me explican que pasan horas junto a su hijo haciendo con él los deberes. Es importante supervisar, acompañarlos en el proceso, pero también dejarles un espacio para que los hagan ellos solos. Es su momento de aprender. Cuando acaben una tarea nos pueden enseñar o explicar como se les ha ido, y las dudas que han tenido. Este es el momento en qué nosotros les podemos ayudar.
• Tenemos que tener en cuenta que nosotros podemos no tener todas las soluciones a sus dudas. No lo sabemos todo, está claro. Pero lo que sí sabemos hacer es buscar soluciones, ayudémosles pues a pensar estrategias que les puedan ayudar a descubrir lo que no saben (diccionario, internet, una llamada en un compañero, etc).
• Es muy importante reforzar siempre el trabajo bien hecho, si puede ser cada día. Seguro que vuestro hijo hace muchas cosas bien durante el rato de deberes, pues premiadlo, con un beso, un abrazo o una sonrisa. Lo motivará para seguirlo haciendo bien.

La hora de los deberes: parte del aprendizaje

Así pues, los deberes son importantes para repasar y asimilar aquello que se ha aprendido durante las clases. Es un rato de aprendizaje que forma una parte muy importante de su vida escolar. Hacer este rato fácil y más agradable les ayudará, y mucho, en su proceso de aprendizaje.

Maria Costa Bosch

Psicóloga Especialista en Aprendizaje

Colegiada nº17280