16 Dic ¡SOCORRO! LA ADOLESCENCIA SE HA COLADO EN CASA Y NO LA HABÍA INVITADO
¿La adolescencia ha llegado a tu casa y no sabes qué hacer?
“No hay manera de que mi hijo ordene su habitación, por mucho que se lo diga no me hace caso”, “se pasa todo el día mirando el móvil, no lo deja ni para estudiar”, “me prohíbe que le dé un beso delante de sus amigos”, “prefiere esta con sus amigos antes que con su nosotros”, “se pasa el día metido en su habitación”, “mi hijo no me habla”, “mi hijo me contesta mal”. Éstos son unos de los muchos comentarios que hacen los padres cuando nos vemos en consulta. Ante ellos, la noticia es clara e irrefutable: la adolescencia ha llegado a casa, y promete instalarse por una larga temporada, trayendo como compañeros de viaje a la rebeldía y la necesidad de intimidad.
Tal noticia resulta inevitable, y llegará antes o después. En nosotros está cómo manejemos tal situación y cómo podemos adaptarnos a este cambio, puesto que no es lo mismo hacer de padre o madre de un niño que serlo de un adolescente (por muy niños que los veamos, ya no lo son…).
¿Qué se esconde detrás de la palabra adolescencia?
Consejos para ayudar a los padres a sobrevivir
Para mejorar el mal comportamiento:
- Mantened una reunión familiar donde podáis estipular los nuevos derechos y deberes que tiene el nuevo adolescente, a diferencia del anterior niño.
- Informa a tu nuevo adolescente de las 3-4 cosas imprescindibles que tienen que pasar en casa, es decir de las normas familiares y determina una consecuencia en caso de que no se cumplan. Por ejemplo: hora de llegada o mantener un respeto hacia todos los miembros de la familia.
- A la hora de aplicar normas y consecuencias los adultos de la casa debéis de ir a la una: si hay división no conseguiréis el buen comportamiento deseado sino que será al contrario (los problemas aumentarán más allá de lo que pasa al inicio de aplicar las nuevas normas).
- Aplica siempre esas consecuencias sin improvisar: por ejemplo, no retires consecuencias que previamente habías establecido (te restará autoridad), ni apliques nuevos castigos movido por el enfado o la decepción. En todo caso, cuando estéis tranquilos volved a revisar las normas y las consecuencias estipuladas.
Para mejorar la comunicación:
- Haz de periodista más que de juez, es decir, pregúntale más y júzgale menos. Incrementarás la confianza y no caerás en lo sabido por todos “cuanto más le diga que no haga una cosa, más atractivo será para él/ella hacerla”.
- Escúchale atentamente cuando te hable de sus problemas y también cuando te explique cosas triviales, como un capítulo de una serie que acaba de ver o te hable sobre su cantante preferido.
Un parto para el adolescente
¡Recordad! La adolescencia es equiparable a parir a un adulto: es doloroso, requiere esfuerzo, pacienc
ia y se necesita apoyo, que crean que eres capaz de hacerlo.
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Melina Ana Dávila Olortegui
Publicado a las 14:48h, 29 septiembreMe alivia escuchar que es parte de un proceso de crecimiento de búsqueda de identidad del adolescente.
Me encuentro muy preocupada por el comportamiento de mi hija y leer esto me ayuda a tener más visión hacerca del trato con ella.
Muchas gracias
Centre Grat
Publicado a las 17:06h, 30 septiembreComo comentas la búsqueda de identidad es una tarea propia de la adolescencia. Desde esta mirada comprensiva es más fácil acercarnos a los/las adolescentes.
Saludos y gracias a ti por el feedback.